Son conocidos como los consumidores del siglo XXI y utilizan todas las herramientas a su alcance para tomar las mejores decisiones de compra. Las nuevas tecnologías y el conocimiento son sus mayores aliados para ahorrar. Además, tienen en cuenta el respeto por el medioambiente y otras preocupaciones sociales.
Seguramente, alguna vez has comprado algo y, al cabo de un tiempo, te has llevado la sorpresa de que el mismo producto o servicio estaba disponible en otra tienda a un mejor precio o con unas condiciones más favorables para ti. Entonces, te quedas con la sensación de que has cometido un error y, por lo tanto, perdido dinero. Una forma de evitar que este tipo de situaciones sucedan y afecten tus finanzas personales es convertirte en un smart shopper (comprador inteligente, en inglés).
La definición de smart shopper es muy sencilla. Como su propio nombre indica, se trata de una persona que compra de forma inteligente, buscando la mayor cantidad de información posible para tomar la decisión más acertada sobre el bien o servicio que quiere adquirir. Debido a la digitalización y al aumento del comercio electrónico, es común que este concepto esté asociado, principalmente, a las compras por Internet, pero también se puede trasladar a los canales tradicionales, es decir, a las tiendas físicas.
¿Cómo ser un smart shopper?
A través de los medios de comunicación, las redes sociales, las estaciones de autobús, los escaparates de las tiendas, etc., se promociona una gran cantidad de artículos y servicios de todo tipo, por lo que la tentación de comprar puede ser constante. A lo anterior se suma la posibilidad, en muchas ocasiones, de tener un smartphone u ordenador disponible en cualquier momento del día para acceder a las tiendas online. Por ello, antes de hacer clic en el botón de pagar, utilizar la tarjeta de crédito o, incluso, desembolsar el efectivo, conviene tener en cuenta las cinco estrategias que te servirán para convertirte en un comprador inteligente.
Criterios de consumo responsables
Una característica del smart shopper es la preocupación por sus hábitos de consumo. Además de buscar el ahorro y la calidad en las compras, como hemos visto anteriormente, también se guía por criterios como la sostenibilidad ambiental. Por ejemplo, a la hora de comprar un dispositivo electrónico es común que una de sus opciones sea consultar el mercado de segunda mano o de productos reacondicionados. Allí puede encontrar artículos que satisfacen sus necesidades por un menor precio, al mismo tiempo que contribuye a la preservación de los recursos naturales. Si te interesa profundizar en esta alternativa, en Finanzas para Mortales puedes conocer los diez consejos a tener en cuenta en las compras de segunda mano online.
Otro hábito en el comprador inteligente es el cuidado de su salud financiera: sabe administrar su capital, minimizando riesgos como el sobreendeudamiento derivado de las compras excesivas y planificando con antelación sus adquisiciones, a través de un presupuesto, entre otros métodos.