Lightning Network es una red descentralizada para procesar micropagos instantáneos de la criptomoneda bitcoin, que ofrece un alto volumen de transacciones y da solución al problema de escalabilidad de Bitcoin, ya que es capaz de soportar millones de transacciones por segundo.
Una de las críticas a Bitcoin es su incapacidad para ejecutar un alto volumen de transacciones en tiempo reducido. Dado que cada diez minutos se añade un bloque a la red de Bitcoin y que el tamaño del bloque está limitado, Bitcoin solo sería capaz de ejecutar entre cinco y siete transacciones por segundo, mientras que, en ese mismo periodo de tiempo, VISA puede ejecutar más de 20.000. El protocolo Lightning Network es una solución a e este problema.
La red Lightning fue presentada por Joseph Poon y Thaddeus Dryja en una publicación divulgada en enero de 2016, en la que apuntaba a este protocolo como la solución al problema de escalabilidad de Bitcoin. Lightning Network es un protocolo de pago y comunicación de capa 2 construido sobre la cadena de bloques de blockchain de Bitcoin. En otras palabras, la red Lightning es una red descentralizada para micropagos instantáneos y de alto volumen de transacciones, que permitiría al usuario realizar operaciones al momento y con comisiones muy bajas. La solución permite que las transacciones se procesen fuera de la cadena, quitando carga a la red principal y mejorando la escalabilidad de la red.
Por ejemplo, Bitcoin agrega transacciones a bloques espaciados cada diez minutos, aproximadamente. Además, con la creciente popularidad de las redes blockchain, el número de transacciones crece de forma exponencial lo que supone un incremento de la demanda por tener espacio en cada bloque, aumentando los costes de transacciones. Este problema hace inviable el uso del blockchain de Bitcoin para micropagos, por tiempo y coste. Imagina esperar diez minutos en el cajero de una cafetería para confirmar la compra de un café.
La red Lightning resuelve estos problemas. Los pagos en esta red no requieren confirmaciones de bloque y son instantáneos. Además, permite pagos de cuantías pequeñas, con comisiones mucho más bajas que mediante el método de validación en la blockchain. Otra de las grandes ventajas de esta red es la escalabilidad; es capaz de soportar millones de transacciones por segundo. Por último, encontramos que, mediante esta red, se elimina el riesgo de delegar la custodia de los fondos a terceros.
El funcionamiento de la Lightning Network es algo distinto a las redes de blockchain y se realiza a través de canales de pago. Las partes abren un canal de pago entre ellas enviando fondos en una transacción inicial a una dirección multifirma, la cual es manejada por ambos involucrados y requiere las firmas de los dos para generar nuevas transacciones. Esta primera transacción es entonces propagada a la blockchain, quedando el canal abierto. Para pagarse, las partes crean transacciones desde la dirección multifirma. Una vez finalizadas todas las transacciones, que no son difundidas en la red aún, se obtiene un resultado de operaciones fuera de red. Cuando el canal se cierra, se registra el saldo final en el blockchain.
En la actualidad, diversas empresas se encuentran al frente del desarrollo de las redes Lightining. Blockstream, Lightning Labs o Acinq son solo ejemplos de nuevas compañías que ofrecen su propia solución de Lightning Network para emitir tu propio activo digital a través de su red, así como realizar transacciones en criptodivisas de forma instantánea.
No solo hay nuevas empresas que ofrecen este servicio, sino que cada vez más empresas, que podemos calificar de tradicionales, se animan a implementarlo en sus sistemas de pago. Algunos ejemplos son:
No obstante, esta tecnología tiene desventajas también como:
En resumen, las redes Lightning se presentan como una solución a un problema que no solo afectaba a la red de Bitcoin (la escalabilidad), sino a otras criptodivisas y llega, incluso, a plantear la posibilidad de agilizar y abaratar los pagos en divisas fiat.
Este artículo tiene exclusivamente carácter educativo y no refleja la opinión ni la estrategia de Banco Santander. Tampoco debe tomarse como asesoramiento financiero.
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