Compaginar la vida personal y profesional es una de las necesidades básicas de cualquier empleado. En nuestro banco, creemos que este equilibrio puede lograrse con un sistema de flexiworking: una forma de trabajar que mejora la eficiencia y la productividad de nuestra plantilla, impulsando horarios flexibles, el teletrabajo y la conciliación de la vida profesional y personal.
Flexibilidad y trabajo eran dos palabras contrapuestas hasta hace poco tiempo. Ahora, conseguir unirlas para mejorar la vida de los empleados se ha convertido en una de las prioridades en muchas empresas. En Santander somos conscientes de esta necesidad y por ese motivo centramos nuestros esfuerzos en facilitar la conciliación laboral y familiar de nuestros trabajadores. Para conseguirlo nos hemos adaptado a los nuevos tiempos y a las nuevas tecnologías a través de sistemas de trabajo que permitan a nuestros empleados trabajar de forma eficiente adaptándose a las necesidades de su vida personal.
Para llegar a esta forma de ver y entender el trabajo, escuchamos el planteamiento de una de nuestras empleadas. Teresa Sáez-Díez, una trabajadora con más de 20 años de experiencia en el Grupo, fue la que habló del flexiworking en la iniciativa ‘Santander Ideas’, una plataforma que creamos para dar a los empleados la posibilidad de compartir una idea con la que mejorar el banco en general. De esta manera conseguimos que a día de hoy se pueda trabajar en nuestra empresa igual que antes pero con un mayor equilibrio personal y profesional.
Una nueva forma de trabajar
La principal característica del flexiworking es que dota de mayor flexibilidad y autonomía a los trabajadores para que sean ellos quienes organicen su trabajo de forma más cómoda. Así, el trabajo deja de medirse únicamente por el tiempo empleado y se evalúa a partir de objetivos y resultados, permitiendo al empleado desempeñar sus funciones a distancia o elegir qué días trabajar.
“Desde que aplico el flexiworking a mi vida laboral, noto que estoy mucho más relajada y menos estresada. No me desplazo en las horas punta de tráfico y paso más tiempo cerca de mis hijos. Llegas a casa y puedes seguir trabajando, sintiéndote más libre”, comenta Sáenz-Díez.
Pero el concepto de flexiworking va más allá de la libertad de horarios. Es una forma de garantizar el bienestar y mejorar la salud de los empleados, reduciendo el agotamiento y el estrés, mitigando los largos periodos de estar sentado y teniendo un mayor control de sus vidas. “Te encuentras mejor, más sano, de tal manera que puedes hacer tu trabajo mucho mejor”, cuenta Ángel Catalán, jefe de equipo, quien aplica el flexiworking en su día a día.
Según los resultados de la Encuesta Global de Compromiso del pasado año, el 82% de nuestros empleados indican que su responsable directo les ayuda a alcanzar un equilibrio razonable entre la vida personal y la profesional. Por otra parte, el 84% de nuestros trabajadores indican que su responsable directo facilita medidas de flexibilidad en el equipo de trabajo.
El mundo laboral está cambiando. Las empresas han de motivar a sus empleados tanto para retener talento como para mejorar los resultados. Para nosotros, el flexiworking es una de las soluciones para conseguir esta motivación. Es una apuesta por una cultura ágil y sencilla, por escuchar a los trabajadores y por conseguir una mayor comunicación entre las personas. En definitiva, es mejorar la vida de nuestros empleados y de nuestra empresa.