Pese a la compleja situación internacional en la que nos encontramos, el comercio exterior de España sigue creciendo. Muchas empresas han encontrado en la internacionalización una oportunidad para el crecimiento de su negocio y la consolidación de su producto y de su marca. Aires de Jaén es un ejemplo de ello.
Jabalquinto y Mengíbar son los pueblos que rodean Finca Badenes. Es el entorno donde se expande la empresa familiar Aires de Jaén. Sus orígenes se remontan a 1965. Hoy, es una empresa consolidada cuyo aceite está presente en más de 50 países. De hecho, de los 9 millones de litros de “oro líquido” que comercializa cada año, exporta aproximadamente 4 millones.
Desde el principio tuvieron clara esta vía de negocio, ya que como reconoce Rosa López, tercera generación de la familia y directora general de la compañía, “hacerse hueco en un mercado nacional, no es fácil. Es más fácil en exportación porque todavía hay mucho camino por recorrer y mucha cultura que difundir respecto al aceite de oliva virgen extra fuera de nuestra frontera”. En este camino han tenido un compañero de viaje “indispensable” para poder llevar sus productos a todo el mundo: Banco Santander.
Además de su clara vocación internacional, Aires de Jaén es una de esas empresas nacidas por y para la comarca en la que Matías López, fundador y abuelo de los actuales gestores, puso la primera piedra. La exportadora de aceite de oliva virgen extra es un ejemplo de proyectos nacidos en entornos rurales que contribuyen a fijar la población y el empleo de la zona en la que se asientan, poniendo de manifiesto que existen alternativas viables al desarrollo de los habitantes de la denominada España rural. Un perfil que representa José Manuel, hijo de Rosa y responsable de Exportación de las zonas de Norteamérica, Latinoamérica y el Golfo Pérsico. Convertido ya en la cuarta generación que se pone al frente de esta empresa familiar, este joven empresario se formó en Madrid para luego volver al lugar que lo vio nacer y continuar desarrollando el proyecto que allá por 1965 su bisabuelo puso en marcha.
Instalaciones y equipo de la empresa andaluza
Proyecto del que Banco Santander forma parte gracias a su apuesta por el campo español y por aquellos que trabajan en este entorno. Y es que la entidad lleva años trabajando para que el sector agro vaya de la mano de los cambios que toda la sociedad experimenta. De esta forma, solo este año ha apoyado a más de 415.000 clientes agricultores y ganaderos españoles, con más de 3.200 millones de euros de financiación. Con el foco puesto en la digitalización y la sostenibilidad, los Anticipos Cosecha, el Préstamo I+D+I Agro o los préstamos a largo plazo para la transformación de fincas a cultivos más rentables, son algunos de los productos más demandados por los profesionales de este sector.
El Fondo Agro Smart es uno de los lanzamientos más recientes de la entidad orientado al sector agroalimentario. Dotado con 500 millones de euros, supone una nueva vía de financiación estratégica para empresas del sector que quieren ampliar sus inversiones y acometer nuevos proyectos de crecimiento, transformación de fincas, digitalización y creación de empleo.