Impacto de la guerra de Ucrania en la economía de la Unión Europea

Artículo de Bruegel analizando las repercusiones en la política económica de la Unión Europea que tendrá la guerra en Ucrania. Según sus estimaciones, la UE se enfrentará a retos adicionales que tendrán un gran impacto presupuestario, con un coste adicional de 175.000 millones de euros o alrededor del 1,1-1,4% del PIB en 2022. Está por decidir cómo se financiará este aumento (impuestos y deuda pública), y cómo debe repartirse este coste entre los distintos Estados miembros y la UE.

• Principales impactos en la economía de la UE: el shock de oferta provocado por el aumento de los precios del petróleo y el gas, el impacto de las amenazas geopolíticas sobre la confianza de los hogares y el sentimiento de los inversores, la necesidad de ayudar a millones de refugiados de guerra y de incrementar el gasto en defensa y un nuevo plan energético en la UE.
   
• Los impactos económicos de la guerra de Ucrania con costes presupuestarios directos a corto plazo para la UE y sus miembros podrían ascender a 175.000 millones de euros o alrededor del 1,1 al 1,4 % del PIB en 2022:
  ‑  50.000 millones de euros para contener los precios internos ante el agravamiento del shock de oferta, a través de transferencias, recortes de impuestos y/o controles de precios.
  ‑  75.000 millones de euros para poner en marcha un plan de independencia energética para reducir la dependencia de Rusia.
  ‑  30.000 millones de euros para mutualizar el coste de acoger a los refugiados de Ucrania.
  ‑  20.000 millones de euros en seguridad y defensa en 2022, y el doble en 2023.
  ‑  Se requerirán mayores gastos a medio plazo, especialmente en seguridad energética y defensa.
   
• La nueva emergencia hace que las esperanzas de normalización post-COVID-19 se vean frustradas. Ahora, los políticos deben unir fuerzas para hacer frente a nuevas emergencias. El shock asimétrico de esta guerra (algunos países de la UE se verán más afectados) implicará un coste compartido como fue el caso de los fondos Next Generation EU extrapresupuestarios. Estos costes adicionales perturbarán el plan de consolidación fiscal planificado a partir de 2023 y es probable que agrave las preocupaciones sobre la sostenibilidad de la deuda pública en los estados miembros más frágiles.